La Federación Provincial de Empresarios de Comercio y Servicios de Málaga, Málaga Comercio, ha anunciado que va a solicitar la declaración de zona catastrófica, ante las lluvias torrenciales que está sufriendo tanto la capital como la provincia.
Deseando a todas las empresas en zonas afectadas por la DANA el mayor apoyo en estos difíciles momentos, y esperando que los daños no sean personales y que las consecuencias de este fenómenos puedan mitigarse de la mejor forma en los negocios, Málaga Comercio ha hecho llegar a las asociaciones de comerciantes y empresarios de la provincia unas recomendaciones para actuar cautelosamente, que los daños no vayan a más y se puedan mitigar poco a poco los efectos adversos:
1. Primar la seguridad en los establecimientos o naves:
– Revisión de seguridad: Antes de entrar, verificar que la estructura del edificio sea segura. Evitar entrar si hay indicios de daños graves en la estructura, como paredes agrietadas, techos caídos o cables eléctricos expuestos.
– Corte de suministros: Si es seguro acceder, cortar el suministro eléctrico y de gas para evitar riesgos de cortocircuito o fugas.
– Uso de Equipos de Protección: Utilizar equipos de protección personal, como guantes, mascarillas, botas impermeables y gafas de seguridad. El agua de la inundación puede estar contaminada.
2. Documentación de los daños:
– Fotografías y vídeos: Documentar todos los daños antes de mover cualquier artículo. Capturar imágenes de los productos afectados, infraestructura, mobiliario y equipo, ya que esto es fundamental para los reclamos al seguro.
– Lista de inventario dañado: Elaborar una lista detallada de los productos y materiales dañados. Incluir la cantidad, descripción y valor aproximado de cada artículo afectado.
3. Drenaje y eliminación de agua:
– Drenaje inicial: Utilizar bombas de agua para drenar el exceso de agua, si es necesario. Para pequeñas cantidades de agua, utilizar cubos o esponjas industriales.
– Deshumidificación: Colocar deshumidificadores y ventiladores industriales en las áreas afectadas para eliminar la humedad y acelerar el proceso de secado. Mantener ventanas y puertas abiertas para ventilar el espacio.
4. Limpieza y desinfección:
– Limpieza de residuos: Retirar cualquier residuo o escombro que haya traído la inundación. Asegurarse de que el personal tenga protección adecuada, ya que estos residuos pueden ser tóxicos.
– Desinfección de superficies: Usar desinfectantes industriales en todas las superficies, especialmente en las que estarán en contacto con productos o clientes. Limpiar y desinfectar estantes, muebles y equipos.
– Gestión de residuos contaminados: Desechar los productos dañados que no puedan recuperarse en un área designada para residuos peligrosos, siguiendo las regulaciones locales para la eliminación de residuos contaminados.
5. Evaluación de infraestructura:
– Revisión de instalaciones eléctricas: Solicitar a un profesional que revise los sistemas eléctricos antes de reconectarlos. Evitar cualquier manipulación sin ayuda de un electricista.
– Revisión de estructuras clave: Consultar a un ingeniero si hay daños evidentes en la estructura (paredes, pisos, techos) para evaluar la seguridad del edificio.
6. Recuperación de inventario:
– Clasificación de productos: Separar los productos recuperables de los que estén dañados sin posibilidad de uso. Limpiar y desinfectar los productos recuperables si han estado en contacto con el agua.
– Almacenamiento temporal: Reubicar los productos recuperables en áreas secas y ventiladas mientras se completa la limpieza y reparación del almacén. Considerar un almacén temporal si la recuperación se prolonga.
7. Documentación y trámites para el seguro:
– Contacto con la aseguradora: Notificar a la aseguradora tan pronto como se pueda. Entregar la documentación de los daños (fotos, videos y lista de inventario dañado).
– Solicitud de asesoría en reclamación: En caso de necesitar ayuda, solicitar la asesoría de un gestor especializado en reclamos de seguros para garantizar que se recibirá la compensación adecuada.
8. Prevención para el futuro:
– Plan de contingencia: Elaborar un plan de contingencia para futuras emergencias, que incluya cómo actuar, evacuación de productos y procedimientos de comunicación con empleados.
– Mejoras en infraestructura: Considerar impermeabilizar o elevar ciertas áreas del local y reubicar productos críticos a zonas elevadas o estantes resistentes al agua.